viernes, septiembre 08, 2006

FIN

Es evidente que este blog ha muerto. De muerte natural por suerte.
Pero podría tomarlo como un cambio de casa.
Ahora, para encontrarme diríjase a Pista de despegue: http://mrsvertigo.blogspot.com/

miércoles, mayo 10, 2006

Sócrates y Setarcos

Otro plagio. Un mail del mismo amigo (que me interpela de algún modo):

Ayer mi esposa se preguntaba si era su marido un intelectual o un artista. Por supuesto que era una pregunta retórica (o sea no era una pregunta en absoluto), pues ella había definido la respuesta antes de que se le ocurriera la pregunta. (Mi esposa es una mujer especial. Por ejemplo, ella "encuentra" relojes de vez en cuando, como si brotaran de los muebles--jamás ha tenido que comprar un reloj, jamás ha pagado por el tiempo.) Sin embargo, su marido ha decidido contestarle de todos modos, diciéndole que él es las dos cosas, que su existencia es en realidad una co-existencia, que su ser (runa) es dos seres, dos espíritus, dos fuerzas contrapuestas, dos nombres: Sócrates y Set Arcos. Sócrates es un pensador, un hombre teórico, un sujeto especulativo y reflexivo que concentra su sangre en la cabeza; Set Arcos es un tipo impulsivo e irracional, que toma decisiones apresuradas según su estado de ánimo, como un gato que sigue sus instintos, toda su sangre en el estómago. Sócrates es un ciego buscador de la verdad, que es su valor supremo por sobre todas las cosas, incluso por sobre la vida; para Set Arcos la verdad no es más que uno de los mil juegos posibles que tiene la vida, de modo que jamás renunciaría a la vida sólo por uno de sus juegos. Sócrates piensa que el placer del cuerpo es una cadena, una cárcel del alma; Set Arcos cree en cambio que es el alma la cárcel del cuerpo. Sócrates se abalanza sobre el mundo para convencerlo de su error, para que el mundo razone, como un sacerdote desesperado, como un misionero en el centro de la apostasía; Set Arcos no se ocupa del mundo, salvo cuando ha de proveerse alimento o satisfacción sexual o algún otro goce de similar naturaleza. Sócrates ve en las artes una especie de debilidad del espíritu, y está dispuesto a expulsar a los poetas de la ciudad; Set Arcos ama la belleza aunque se le diga que es falsa, y no se preocupa de quién está o no está en la ciudad, porque no cree en la ciudad. Para Sócrates, la gente vive obnubilada por un universo ilusorio y efímero inventado por los sentidos, esas palas infieles que han cavado una morada subterránea postiza debajo de la realidad; para Set Arcos no hay nada más cierto que un beso, una melodía, un buen gol, un orgasmo o un plato de porotos granados bien condimentados, y jamás habría imaginado otro mundo que el suyo. La geometría, la lógica, la física, la metafísica y la ética son para Sócrates las disciplinas supremas, aquéllas que levantan a los hombres hacia las alturas de lo ideal; "disciplina" es una palabra que Set Arcos rehuye, libre como está en el harem de sus musas, bebiendo poesía y degustando torpes divagaciones infundadas sobre la naturaleza humana, que más está para gozarse que para estudiarse. Que estos dos no se pongan nunca de acuerdo es algo que sufro y disfruto; me gusta ser uno de día y otro por las noches, aunque cada uno reclama para sí el día completo, de modo que en definitiva siempre soy los dos al mismo tiempo, por más que Sócrates insista en que aquello no es posible y Set Arcos se queje tan a menudo de que el otro lo está volviendo loco.

De lejos

Como no tengo tiempo para escribir, posteo una carta de un amigo que está bonita (plagiando para subsistir....qué bajo!!):

Hola querida amiga!

De pronto, con el sigilo de la aurora, la memoria (ese capricho que se manda solo cuando quiere, y que casi siempre quiere) me llevó primero hasta tu rostro (sonriente), luego hasta tu nombre, luego hasta tu voz (y sobre todo hasta ella, quién sabe por qué) y finalmente, por qué no decirlo (si ya te lo he dicho, además), hasta tus “caderas” (no me quiero poner ordinario, pero tú me entiendes). A veces miro a mi alrededor y me pregunto qué sentido tiene todo esto (lo adolescente no se quita fácilmente, si es que se quita). Luego, por suerte, me río y comprendo que reírse, disfrutar, sentir el placer de existir es ese sentido. Quizá es esa viveza con que te he visto disfrutar de las cosas la que me llevó esta noche a recordarte y a querer enviarte un saludo, y a decirte que ¿por qué no hacemos un carrete? Claro que no es tan fácil. Está la distancia, y también la distancia que la soledad de este pueblo (no soledad de gente, que hay harta, sino soledad de amigos, que hay pocos) ha puesto entre mí y el carrete. Ya casi no busco a la gente (cualquiera diría que la rehuyo, pero no es así, ése no es mi estilo, o al menos no el más común, creo, aunque en realidad a veces me da lata estar con gente, pero todos sabemos que eso le pasa a todo el mundo, que es normal, que lo raro sería que no me pasara, que si me pasa debe ser por algo, y que se me va a quitar luego, porque ya no tengo edad para irme en esas voladas, qué dirían los psicólogos, las etapas del desarrollo, etc.). Van a ser las dos de la mañana, hace frío. Una vez, hace años (qué increíble que de pronto esa expresión comienza a hacerse más frecuente de lo que uno esperaría), Felipe Burrows me dijo que el pensamiento le daba frío. No quiero quitarle a ese comentario el inmenso valor poético que de hecho tiene, pero se me ocurre que Felipe debe haber pensado harto mientras vivía en Villarrica, y un poco por eso dijo lo que dijo.

El otro día fui a hablar con el juez de menores, por un asunto de la pega. Yo andaba bien chascón y con el pelo bastante largo. El juez me empezó a hablar como viejito arteresclorótico y, entre otras barbaridades, me comentó como de pasada (a propósito de un menor que usaba el pelo chascón) que él tenía la idea de que los chascones eran terroristas. Después me prestó un libro fundamentalísimo para el buen funcionamiento del juzgado (libro que, por supuesto, me llevé, un poco por un afán perverso de ver qué pasaba) y, por supuesto, dicho funcionamiento se desbarató por completo y días después recibí unos llamados atroces del secretario del juzgado, diciéndome que necesitaba el libro urgentemente, que ese tipo de documentos no podían sacarse del juzgado, etc. Yo sentí un placer indescriptible por esto de estar causando un desajuste administrativo radical y, evidentemente, me hice de rogar, y no devolví el libro hasta unos días después. Me gustaría que hubieras visto la cara de alivio que había en cada uno de los funcionarios de esa institución cuando vieron aparecer el libro (que no sólo se lo habían llevado, sino que además estaba en manos de un terrorista). Trataron de retarme y todo eso, pero estaban atados de manos, porque el mismísimo señor juez me había facilitado el famoso libro, y un juez es algo así como un caballero al cual hay que respetarle todos sus delirios.

Bueno, se hace tarde y corro el riesgo de entrar en ese tipo de reflexiones existenciales que pueden volverlo a uno un terrorista de la cabeza (aunque no por el pelo, se entiende). Espero que estés bien, contenta, disfrutando de los placeres varios que existen. A propósito de dos de esos placeres, hace un rato le escribía a Cristóbal que, pese a las contrariedades existenciales, por fortuna siempre está la amistad, que es una especie de joya inviolable, un tesoro que no puede ser escondido. Y la mujer, que es una joya... Bueno, no quiero decir groserías. Pero de que es también, a su modo, una especie de tesoro, lo es.

Ojalá podamos vernos pronto (dicho sea de paso, mi casa está abierta para una visita; quizá en verano te animas, quién sabe, hasta podríamos juntarnos un grupo, el Edmundo me dijo que tenía ganas de venir, lo mismo Cristóbal). Mientras tanto, un abrazo!

martes, febrero 28, 2006

Moraleja veraniega


Este verano puedo decir que saqué algunas conclusiones fundamentales respecto a mis vacaciones:

1. No puedo estar más de una semana en el mismo lugar.

La primera vez que me pasó fue en una de las playas más bellas del mundo, según no se qué revista gringa del tipo News Week o Times o algo así: Jericoacoara. Muy al norte de Brasil.
Linda sí, entretenida sí, pero a la semana me empecé a hostigar, a los 15 días estuve a punto de devolverme a Chile y a la tercera semana amenacé a mi amiga Paz a abandonarla a su suerte si no nos movíamos. Pensé que se trataba de que echaba de menos a mi pareja de ese entonces, pero ahora que lo pienso mejor es una cuestión de costumbre. Desde muy pequeña mis vacaciones fueron bien nómades. Una semana en Caburga, otra en Panguipulli y otra en Chiloé o en Bariloche o en Valdivia. Las combinaciones eran variables, pero con mis padres fue el sur, siempre el sur y con amigos, el norte y más tarde fuera de Chile.

2. No soporto el modelito de vacaciones: "dueña de casa con vista al mar"

En Chile es ultra popular arrendar una casa en la playa o en un lago o donde sea y llegar a instalarse allí por todo un mes con camas y petacas. Yo francamente no le hallo ninguna gracia. Encuentro fomísimo tener que hacer camas, cocinar y lavar platos, limpiar el water y trapear la cocina en tus vacaciones!!! Este verano me tocó así (aunque la casa era prestada y eso estuvo bueno, porque cuando un solo bolsillo debe financiar el arriendo de la casa en la playa son palabras mayores). Mi amor y yo lo hicimos todo juntos, o más bien miti -mota y por turnos y eso estuvo buenísimo (incluso un día me llevó la comida en bandeja hasta la cama donde yo vegetaba viendo 16 horas diarias de televisión), pero aún así lo encuentro deplorable para cualquiera. No sé como será cuando hay una nana que lo hace todo. Raro debe ser, sobretodo si es la misma nana de siempre. Al final es como cambiarse de casa por algunas semanas, y si te toca hacer de dueña de casa, aunque no lo hagas el resto del año, aunque ames a la persona para quien cocinas, aunque desde la ventana de la cocina se vea el mar, aunque los pajaritos canten en el pino del patio mientras cuelgas la ropa recién lavada....it sucks. Para mi al menos.

3. La horizontal tiene un cierto encanto durante un tiempo corto.

Me refiero a la horizontal las 24 horas del día: la horizontal en la orilla de la piscina, la horizontal viendo tele, la horizontal durmiendo horas extras.... la única horizontal que es siempre encantadora es de a dos, uno sobre otro, claro.

Sin paseo, subir un cerro, caminar por la playa, ir al pueblo de al lado, termina aburriendo.
Además la horizontal engorda. Y si vas a engordar en vacaciones, mejor que sea punta de comida que cocinen otros, o de panes con mortadela, completos y empanadas si el presupuesto es escaso.

4. Las vacaciones son un buen ensayo de convivencia con tu pareja.

Sirven ene para eso. Casi como un reality. Ves como te llevas con tu amor en la vida cotidiana sin terceros involucrados, como te repartes las tareas, como te cuidas, te regaloneas, como discutes , como te enojas, como resuelves conflictos y si tienes onda y lo pasas bien o todo depende la gente que te rodea, del carrete producido con ruido alrededor.

En este caso, la prueba fue superada con éxito...pero no nos ganamos una casa. Y deberíamos!

No es de cool

Being a woman.


¿Por qué en inglés? Porque en inglés se puede decir “being” y no solo “to be”, o sea que no solo se puede hablar de “ser mujer” sino de lo que significa estar “siendo mujer”.

El infinitivo, “ser” me parece más abstracto y atemporal comparado con el “siendo” que alude más a lo histórico y a lo contextual. Por eso, being a woman y no "acerca de ser mujer" o algo así.... cosas del lenguaje...y de las palabras que uno tiene a mano....

Being a woman

Voy a decir un montón de cosas que a un montón de gente le parecerán nauseabundas, crudas o, al menos, poco delicadas, pero hace rato que tengo ganas de decirlas y no me voy a dar el trabajo de decirlas bonito o con eufemismos, las voy a largar no más.

Ser mujer y heterosexual, independiente de todo lo que se pueda decir respecto al rol social que conlleva, involucra algunas experiencias fundamentales. Fundamentales porque están inseparablemente unidas a nuestra anatomía. Y no sé cuánto nos determinarán, pero seguro que las tenemos pegadas a la piel.

Para empezar, como mujer heterosexual siempre me lo van a meter. Yo lo hallo una limitación atroz de la vida sexual. Encuentro que sería mucho más divertido tener una gama más amplia de experiencias sexuales. A mi me encantaría saber cómo se siente meter un pedazo de ti mismo dentro de otro ser humano, de aquel que deseas, de aquel que amas. Pero yo no puedo acceder a eso. No tengo nada en mi organismo que me permita penetrar a otro del modo como soy penetrada. Y meterle un dedo en la boca o en el culo a un tipo no es lo mismo. Que suerte tienen algunos homosexuales hombres en este ámbito…tienen pico y tienen hoyo y pueden elegir qué quieren en el polvo siguiente: meterlo o que se lo metan.

Tengo una amiga que dice que eso es identificarse con una cuestión patriarcal, con el hecho de ser poseída, de ser conquistada territorialmente, pero yo digo que eso es bullshit, que no se trata de poseer o no, sino de un rango de experiencias que nunca podré tener porque la anatomía de mi cuerpo me lo impide.

Para rematar el tema sexual, desde el punto de vista anatómico, cuando a uno se lo meten sin condón y el otro termina adentro tuyo, la relación sexual se prolonga para uno mucho más allá de lo que uno mismo desearía, para uno dura mucho más que para el otro. Uno folla un cierto rato y después, recupera el aliento, y -en el mejor escenario- se acaricia, regalonea, conversa, incluso puede dormirse una siesta y despertar, ducharse y vestirse, y cuando uno ya retomó la vida tal cual iba, y está listo y dispuesto para cumplir con algún rol o tarea cotidiana, cuando el otro hace rarto que ni piensa en el polvo que se pegó, cuando uno menos se lo espera….sientes que un líquido caliente y viscoso baja desde dentro tuyo y cae mojándote los calzones limpios, recién puestos.

Entonces, uno cacha que uno es un receptáculo. Que el otro pone algo de sí dentro tuyo y cuando él ya está a kilómetros de distancia, te das cuenta que todavía lo llevas contigo, que no te abandona tan fácilmente. Y quizás hasta esto tenga que ver con la memoria, quizás uno se acuerda más del polvo que se pegó con el susodicho hace un rato, la noche anterior incluso, y el macho que eyacula, que puede vestirse e irse, no tiene ningún determinante anatómico que lo obligue a volver a aquél escenario erótico y buscar entre los dedos un olor, un recuerdo más placentero, más mamífero de aquél encuentro.

That s being a woman. Sometimes.


del increíble lucien freud: naked girl asleep

sábado, enero 07, 2006

Debería estar prohibido

Así como están prohibidas las drogas, debería estar prohibido enamorarse.
Siempre he pensado que las drogas están prohibidas porque van contra la lógica de la productividad. En una sociedad que exige trabajar y producir, no se puede andar eligiendo libremente el estado de conciencia en el que uno quiere estar.
Pues con el amor pasa algo parecido.
A uno se le olvida eso de trotar una vez por semana, los 200 abdominales, la tesis que debe avanzar, la escritura, el blog, los deberes. Los que trabajan probablemente gastan más tiempo del debido en el teléfono o en messenger, o simplemente, mientras miran la pantalla del computador, están volando en la estratósfera, imaginando cosas que sucederán, recordando curvas, anhelando estar en otro lado. Se pasan los dedos de las manos por la nariz y allí hay un olor conocido y deseado.
Es una suerte de fascinación. Un encantamiento.

Si mal no recuerdo, Freud decía que el desarrollo de la mente, y luego el progreso de la civilización estaban originariamente destinados a asegurar el placer. Es decir, si el aparato mental funcionara dirigido por el principio del placer de manera primitiva, sería un dispositivo por el que la energía (la pulsión) pasaría rápidamente hacia la descarga. Pero la cosa evoluciona desde aquello para asegurar un placer más estable y más a largo plazo. Así nace la mente, el pensamiento, el trabajo, el progreso, la civilización. Para tramitar la energía pulsional (y bueno, sublimarla, a veces).
En este proceso, el desarrollo de uno mismo hacia la inteligencia, la productividad y la transformación en personas atractivas, está orientado a conseguir el objeto de deseo que nos completa. Pero resulta, que cuando lo conseguimos ya no queremos trabajar, nuestra inteligencia se ve claramente disminuida, y el desarrollo de la sociedad nos importa un poco menos. Todo aquello que creamos para asegurarnos el placer, cuando lo tenemos entre manos, nos sobra y preferimos pasarnos mirando a los ojos al otro en lugar de la pantalla del computador, yacer con las piernas entrelazadas en lugar de levantarnos, conversar de cualquier cosa en vez de teorizar acerca de el que sea nuestro interés profesional. Y si es invierno peor, porque preferimos quedarnos bebiendo una copa, viendo una buena película debajo del plumón, en lugar de salir a buscar algo de vida social.
Entonces, en pos de la coherencia social, ¡o legalizamos las drogas o prohibimos el enamoramiento! O, en última instancia, retrocedemos hasta ser reptiles.

martes, diciembre 27, 2005

NAVIDAD

GRACIAS VIEJITO PASCUERO POR FAVOR CONCEDIDO

jueves, diciembre 08, 2005

Historias de amor

Fue el 28 de diciembre de 1992. Yo tenía 18 y él casi 20. Era el cumpleaños de mi amigo Chernilo, a quien conocí en el preuniversitario. Chernilo vivía a tres cuadras de mi casa, así que me fui hasta allá caminando con mi hermana. Él, Diego, apareció con su cuerpo tremendo y alzó los brazos como colgándose del techo. Yo lo ví y juro que cada célula de mi cuerpo dijo: "Él es".
Nos miramos, nos sonreímos, hablamos de alguna cosa, supongo. Lo que recuerdo más fue su entrada de galán que hacía temblar. Yo estaba sola sentada en un escalón y él llegó a sentarse a mi lado y me dijo "Tú, aparte de tener los ojos verdes ¿Qué más haces?". Yo no hacía nada en realidad, había dado la PAA recién, no sabía qué iba a estudiar, no hacía nada. Por lo tanto no supe qué responder y creo que dije "Canto en el coro". ¡Qué ñoña! Era cierto, cantaba en el coro de mi colegio, que era un buen coro. De hecho ese verano dimos un concierto en el Municipal, cantamos el Stabat Mater de Pergolesi.

No recuerdo cuánto más hablamos o compartimos en ese cumpleaños, pero recuerdo que en el momento de irme, me despedí de todos dejándolo a él para el final. Y al darle un beso en la mejilla, me dijo al oído "Pornography queda chico al lado tuyo".

Era un piropo en clave: Pornography era el disco más romántico y estremecedor de The Cure. Y él sabía que yo sabía.

Al día siguiente, llamé a mi amigo Chernilo y le pedí el teléfono de Diego. "Está pololeando", me dijo. "Ya sé" le respondí.

Respiré tres veces y lo llamé.

-Tenemos un problema...
-Ya sé que estás pololeando-
dije-.
-Ese no es el problema.
-¿Cuál entonces?
-Que en unos días me voy al sur por un mes y no tenemos tiempo para conocernos, coquetearnos, pinchar y todo eso...
-Ah. Pero el tiempo es una convención. Un mes puede ser poco.
-¿Te gusta el ajo?
-Sí ¿por qué?
-Estoy con mi prima y vamos a comer tallarines con ajo ¿quieres venir?
-Voy para allá.

Resulta que Diego vivía a ocho cuadras de mi casa, pero eran cerca de las 11 pm. y en mi casa aún eran terribles con los permisos. No era llegar y salir. "Daniel Chernilo terminó de escribir un cuento y quiere que yo lo vaya a leer" le dije a mi mamá (ella le tenía buena barra a Daniel porque era inteligente y bien portado). "Bueno, te acompaño hasta allá". "Chuuucha, pensé. Y bueno, me acompañó, mientras yo rogaba porque Daniel estuviera despierto y no me mirara con cara de ¿qué haces tú acá? al verme aparecer. Mi buena estrella me facilitó las cosas (en ese tiempo yo tenía buena estrella siempre) y en la puerta de Daniel estaba su hermano menor, Raúl. Lo saludé, "Daniel me espera" y entré.

Le tuve que explicar a Daniel todo el enredo y tuve que aceptar que fuera conmigo. Llegamos donde Diego, jugamos cartas, comimos, nos reímos. Me despedí en la puerta, no sin antes averiguar donde iba a ir para el año nuevo.

El 31, tuve que mentir, otra vez, como siempre, para ir a la fiesta en el subterráneo del Omnium. Yo iba vestida con chaqueta y corbata. En ese tiempo tenía la piel blanca como papel y me pintaba mucho los ojos con delineador rojo y sombras de colores. Muuy dark. Al rato me encontré con él en la barra. Nos saludamos y nada más. Él andaba con su polola que nunca me vio, a pesar de que yo bailé a su lado toda la noche. En la madrugada, ella lo tomó de la mano para irse y yo lo tomé de la otra. Él me miró como diciendo "no, por favor". Yo saqué una carta que llevaba para él y se la pasé. Le sonreí y se fue. Al día siguiente se iba de vacaciones con ella.

Una semana después, Daniel me dice "parece que en la casa de Diego hay una carta para ti, porque tiene tu teléfono en el sobre". La fui a buscar de inmediato.

"FUE UNA BUENA NOCHE. BAILASTE MEJOR DE LO QUE ME HABÍA IMAGINADO. TUS DIENTES ESTABAN AÚN MÁS BLANCOS QUE ANTES, Y DIOSES, ESA BOCA DE MENTIRA QUE TIENES MÁS ABAJO DE LOS OJOS. ME SACUDO COMO PERRO, MIRANDO EL SUELO, VEO SUS TOBILLOS, Y LA AMO, PERO NO LA VEO, TE VEO A TI, ESCUCHO TU RISA QUE LO LLENA TODO, SIENTO EL OLOR DE TU FRENTE. NO SE QUE DEBERÍA HABER HECHO PERO SIN DUDA NO HICE LO QUE QUERÍA. AHORA ME VOY, TU DICES QUE EL TIEMPO ES UN DETALLE, PERO SE QUE SABES LAS MARAVILLAS QUE SE PUEDEN HACER EN UN SEGUNDO. ES CIERTO, UN MES NO ES MUCHO; ES IMPREDECIBLE. QUIZÁS YA NO VAYA MÁS CON ELLA, QUIZÁS YA NO QUIERA MÁS QUE VERLA TODO EL DÍA, NO SE, DE TODAS MANERAS, GUSTO A POCO ES UN MITO INDEFENDIBLE QUE NO SUFRIRÁS; PERSONAS CURIOSAS MOVEMOS EL UNIVERSO.

-HUIDOBRO ES GRANDIOSO, GRACIAS POR RECORDÁRMELO Y DEJARME SABER QUE SABES.
- ESTÚPIDAMENTE CREO QUE TE VOY A ECHAR DE MENOS , PERO NO ES ETERNO.
- CUANDO VUELVA LEEMOS + HUIDOBRO Y NOS ENROLLAMOS JUNTOS EN SU SÁBANA DE PALABRAS.

CUÍDATE, SIGUE SIENDO UNA DE LAS MÁS LINDAS QUE CONOCÍ Y POR FAVOR, NO MUERAS EN MI AUSENCIA, PORQUE NO VOY A ESCRIBIR.

VOY A ESTAR ESPERANDO QUE ESPERES.
CIERRA LOS OJOS Y ESTOY AQUÍ"

Morí. Así de simple.


En los días siguientes escribí 8 o 9 cartas con recortes, papeles de colores, poesía, fotos y palabras de ansiedad. Como no tenía donde mandárselas se las dejaba en su casa.

El 23 de Enero, estaba yo con un par de amigas y con Daniel, haciendo nada. Daniel llama a su casa y dice "Diego volvió". Partimos a verlo. Tuvimos que hacer toda una parafernalia, tomar once, ver una película (mientras él acariciaba en la oscuridad mi oreja), jugar cartas para dejar que la noche avanzara y los demás quisieran irse. Estábamos sentados en la mesa de la cocina, cuando mis amigos se decidieron a marcharse. A penas Daniel cerró tras de si la puerta de entrada, Diego se abalanzó sobre la mesa para besarme. Y no paramos nunca más.

Al día siguiente su mamá nos iba a dejar a mi casa donde íbamos a dormir. "Niños- nos decía- ¿no será mejor gatear antes de caminar?". "Imposible gatear cuando estamos en medio de una carrera desesperada, mamá", respondía él.

No nos separamos ni por un solo día por años. Y las cartas, postales y tarjetas duraron años, también. Y miles de sorpresas heroicas, como yo llegando al dentista y la secretaria entregándome mensajes de amor que él había pasado a dejar horas antes porque sabía que yo iba a ir. O yo saliendo a clases en la mañana y encontrando colgada en la reja una hoja de cuaderno con cientos de besos y languetazos en clave.

Ese hombre me cambió la vida. Yo no sabía que podía amar hasta ese instante, ni sabía que me podían amar de ese modo. Yo solo quería morirme temprano y su amor fue taaaan enorme que me dieron ganas de ser la mamá de sus hijos y esperar a que la vida hiciera lo suyo y morir de vieja a su lado. Ese hombre me regaló las ganas de vivir, la esperanza.

Ese hombre se casa en febrero y yo solo quiero que sea infinitamente feliz y que tenga unos hijos hermosos que le llenen de gozo el corazón, porque va a ser un papá de lujo.

miércoles, diciembre 07, 2005

Lo más grosero

Lo más grosero que he escuchado este año:

"La paja es rica, pero culiando se conoce gente"

¡JA!

lo peor es que es un poco cierto...