miércoles, octubre 26, 2005

Piropos

Mejor piropo de este año:
Moviendo la cabeza de lado a lado como para sacudirse una impresión:
"Me obnubila tu cerebro"
F.H.
Me jor piropo del año '92:
Despidiéndose y hablándome al oído:
"Pornography queda chico al lado tuyo"
D.F.
Mejor declaración de amor a-posteriori ever:
"Sentía que si seguía el parque forestal se iba a incendiar conmigo"
F.C.

martes, octubre 25, 2005

Regalos últimos

Esta es una lista de los regalos más últimos que he visto:
  • Para navidad una amiga recibió, de parte de su madre, un violín en miniatura con un atrilcito donde se posaba para ser expuesto. Guaaajjjj!!
  • Para otra navidad, mi misma amiga recibió, de nuevo de parte de su madre, un azucarero de esos que hay en los cafés, pero fino, es decir, de vidrio y de plaqué. UUUyyyy!!!
  • Para mi cumpleaños, mi mamá me regaló un perchero enlacado gris de líneas muy rectas (un palo con varios otros palitos perpendiculares), estilo muebles sur, pero absolutamente horrible e inútil (¿Quién cuelga qué en un perchero?). Guacatela!!
  • Para otro cumpleaños, mi papá me regaló un pantalón negro a la cintura con pinzas y una blusa de rayón blanca con hombreras. Ambas prendas eran lo más parecido al uniforme de una inspectora de colegio, una secretaria vieja o una vendedora de isapre. Espantoso!
Hace 2 años que mi papá me regala para el cumpleaños una botella de algo bueno (este año fue de Amarula). Sé que puede parecer último que tu papá te regale un copete, pero al menos, me hace sentir que me conoce un poco más que cuando me veía vestida de vieja culiá.

martes, octubre 18, 2005

SÍ, SON 25

25 olores. 25 tamaños y formas diferentes. 25 risas, miradas de ida y vuelta. 25 voces y diferentes palabras. 25 veces que confío. 25 tipos de besos en mi cuello (besos de 25 tipos en mi cuello). 25 esperanzas o casos perdidos. 25, algunos desafíos, algunos encuentros puntuales y escasos. 25, unas veces intentando no estar tan sola y otras no dejarlos tan solos, unas veces inspiradas, unas francamente, macabras. 25, unas veces esperando, otras no esperando nada, unas dándolo todo, otras sin dar nada. Aún así, 25 derrumbes, 25 veces que no fueron, o que fueron sólo por un rato. Unas pocas que fueron un error, sin remedio. La peor de todas, la que no te deja ver y te equivocas de-a-de-ver-as con promesas y todo.
Es mucho? es poco? no sé, pero ¿Cómo no estar cansada? ¿Cómo creer? ¿Cómo creer en la idea de "absoluto", de "amor de mi vida", de "para siempre", o al menos de "tirémonos de piquero" ? Estoy empezando a creerles a los sihk (así se escribe?) y a ver que cada uno deja una marca en mí (¿dejaré yo una marca en ellos?).

Esta es una parte de mi. La otra....justo la otra mitad....escucha Camilo Sesto y cree a pié juntilla con cada canción y anhela y desea y ama y se entrega cuando vislumbra el brillo ese.....ese!

Yo no me como las uñas


Desde chica que me como la piel que rodea mis uñas. Hace un tiempo recordé cómo y porqué partió esta manía. Un día descubrí que las cutículas eran duritas y que si yo les pasaba un dedo suavecito no sentía nada. No era como la piel de las yemas, la palma o el dorso de la mano. Era más bien como la piel de los codos, casi sin sensibilidad, pero además era dura y seca. Entonces -yo debo hacer tenido 5 o 6 años- decidí que esa era piel que estaba muerta, que más valía sacarla.

Hoy día me pregunto cómo es posible que tan temprano en la vida se intale la sed por sentir. El hambre de intensidad. La desnudez sin piel a costa de un poco de sangre y dolor. Porque estoy hecha una caníbal, sólo detengo esta autofagocitación cuando mis dedos sangran y duelen. Augch!!

miércoles, octubre 12, 2005

La nostalgia anda en el aire



Se acentúa con la primavera, así que aquí va el primer pedazo de nostalgia voraz que conocí.

ERAMOS LOS ELEGIDOS DEL SOL

Éramos los elegidos del sol
Y no nos dimos cuenta
Fuimos los elegidos de la más alta estrella
Y no supimos responder a su regalo
Angustia de impotencia
El agua nos amaba
La tierra nos amaba
Las selvas eran nuestras
El éxtasis era nuestro espacio propio
Tu mirada era el universo frente a frente
Tu belleza era el sonido del amanecer
La primavera amada por los árboles
Ahora somos una tristeza contagiosa
Una muerte antes de tiempo
El alma que no sabe en qué sitio se encuentra
El invierno en los huesos sin un relámpago
Y todo esto porque tú no supiste lo que es la eternidad
Ni comprendiste el alma de mi alma en su barco de tinieblas
En su trono de águila herida de infinito

Vicente Huidobro. Últimos poemas (libro póstumo). 1948.

lunes, octubre 10, 2005

Cuide sus palabras

Hay algunos comentarios que detesto escuchar:
  • "Nooooo, con ese hueón no": ¡Qué fácil es juzgar a los demás! Acordárse de cuando los otros pastelean y no de cuando uno pastelea, notar las pifias ajenas y no las propias, saber los errores que los demás han cometido y no llevar la cuenta de los propios. Sin pretender moralizar, pero haciéndolo, yo diría "El que esté libre de pecado que lance la primera piedra" (algunas de las cosas que dijo don Jecho son sabias y debiéramos recordarlas más seguido).
  • "¿Y usté anda solita? Pero yo no entiendo...¡Cómo una mina como usté anda solita!": ¡¡¡Hasta cuándo este tipo de comentario!!! 1. No tiene nada de malo andar sola, al revés. Uno llega y se va cuando quiere. Nadie se ve obligado a aguantarle la estupidez a uno y uno no se la tiene que aguantar a nadie, asi como la borrachera, el aburrimiento o la lata. Y a veces, además, uno se va con quién quiere. 2. Uno anda sola porque no se conforma con cualquier cosa, porque si es cosa de andar acompañada hay una cachá de giles que pueden servir de "peor es ná". ¿Pero quién quiere eso? 3. Tampoco es cosa de querer andar sola. Uno anda sola porque está sola, porque no depende de uno que aparezca mr.right man (o al menos un straight man, en el sentido más amplio de la palabra) y porque no sirve de nada desearlo o buscarlo. Llega cuando llega y ya. Ná que hacer al respecto. 4. La mayoría de los machos que hacen este tipo de comentario son unos mamones que no se atreven a nada. No tienen ninguna iniciativa de seducción y una tiene que hacer toda la pega. Te quieren comer, pero te quieren en bandeja. Uno tiene que dirigir la mirada, intencionar el gesto, meter conversa, sacar a bailar, mostrarse sexy y poner cara de "sí, dale". Sólo entonces se tiran a la piscina. Me tiene chata. Yo no hago más la pega.
  • "Ella es muy mina pa' él": ¡verdad que lo que importa es cuán mino es el candidato! Sin comentario.
Cuide sus palabras. Cuide su karma. No ande tirando mala onda que tarde o temprano se devuelve.

Déjalo, si no te aporta.

En septiembre de 2001 dejé de ver noticias. Y frecuentemente escucho "¡pero cómo no veís noticias!". Aquí respondo.
Antes las veía casi todos los días, pero después del asunto de las torres gemelas, se me hizo más evidente que antes que me pichuleaban todos los días entre 9:00 y 10:00. Creo que nunca antes las noticias fueron más sesgadas, más dirigidas políticamente. Y eso que cuando uno trabaja cerca del gobierno o del mundo donde la política tiene influencia, se da cuenta pronto que lo que llega a la opinión pública, en general, lo ha decidido alguien.
Seguramente existen formas de acceder a una versión más completa, más diversa y con perspectivas más amplias de las noticias (deben existir sitios en internet, diarios más críticos como le monde diplomatic) pero me tomaría un esfuerzo gigante y seguramente, también, nunca llegaría a sentirme realmente "informada".
Con el tiempo sin noticias me di cuenta de un par de cosas. Primero caché que vivía harto más feliz. Que se me pasó esta sensación permanente de extrañamiento, de sentir que nunca entendía cómo y porqué las cosas funcionan como funcionan, de sentir que no entiendía a la gente. Como cuando fueron las elecciones en que salió Lagos. El día anterior yo estaba en un cumpleaños con hartos amigos y todos estaban felices comentando que la izquierda extra-concertacionista iba a dar una sorpresa y obtendría entre un 8 y un 10% de los votos. Yo no voté por la Gladys Marín, voté nulo igual que siempre, lo que sólo agrava las cosas, cuando al día siguiente los resultados fueron los que fueron. No me acuerdo con exactitud, pero creo que la izquierda, más los nulos sacaron menos del 5% y Lavín y Lagos sacaron el 47% cada uno. Mis amigos y yo no existíamos y una de cada dos personas que se cruzaban conmigo por la calle habían votado por este boy scout pinochetista. Qué sensación más horrenda de sentirse extranjera en tu barrio de siempre!

Segundo. Me di cuenta de que las noticias son un programa como cualquier otro. Una teleserie con otro tipo de argumento, pero teleserie al fin. De noticias nada. Los hechos importantes no salen, las noticias con trascendencia no salen, lo que uno debería saber para cachar que está pasando en Chile y en el mundo no sale. Salvo excepciones, uno nunca se entera de huelgas importantes, acciones de las multinacionales, leyes aprobadas y veredictos judiciales fundamentales. Cosas que realmente afectan nuestras vidas. Uno tiene que mamarse una hora de "Fulanito dijo de no se quién, no se qué" y "Menganito le respondió..." (y no me refiero a la farándula sino a Dávila versus Longueira, Insunza versus Moreira, etc), que la delincuencia aquí y allá, y los más tontos comentarios de fútbol. Una soberana lata. Cero contenido, cero importancia, cero interés. Para ver un programa de una hora que no me aporte nada, prefiero ver ER. Y de las cosas importantes uno se entera igual. Las escuchas en la calle, en el metro, en tu casa. Un poco tarde, pero igual.
El costo-beneficio de dejar las noticias ha sido enorme. Háganme caso. Quit the shit!!!

miércoles, octubre 05, 2005

Pánico escénico

Debo admitir que el fin de semana me entró el pánico escénico. Me puse ultra adolescente y me dio por desear que mi película se acabara antes de tiempo (o sea, ahorita ya!) . Que este "cheque a fecha" como me dice Oddó se quedara sin cobrar. Pero ya se me pasó ¡por suerte!
Iré a la batalla con mi mejor sonrisa y con una botella de whiskey en la mano para envalentonarme. Iré a tratar de pasarlo bien en el proceso, iré soñando, pero entendiendo que todo en la vida requiere trabajo y esfuerzo y que nadie es Mozart, que a nadie le sale bien a la primera, ni a la segunda. Con suerte a la tercera. Iré con todo mi corazón, pero con humildad para que no me entre la angustia del fracaso anticipado. Iré tratando de sentir que no soy la mejor, pero tampoco la peor y que si todo va mal, igual me van a querer, igual me voy a querer.
Mi psicóloga dijo hoy que, en mi inseguridad, tuve que llegar a doctorarme en mis quehaceres académicos para atreverme a tomar un camino divergente. ¡Qué lúcida que es! ¡Qué boba que soy!

(Gracias a ti, P, por acompañarme en la estupidez de este weekend y soportarme)